martes, 13 de diciembre de 2011

Sigo viva!!

Y sigo viva…. :D
Hoy no estoy especialmente inspirada, pero os escribiré igual porque, para variar, os tengo abandonaicos!
 En la competición me fue bastante bien. Estaba demasiado nerviosa, tanto que me temblaban las piernas antes de salir al escenario. Fui la primera en hablar. Al principio los nervios no me dejaban hablar con soltura, pero conforme fui avanzando en mi presentación, me sentía más relajada y hasta bromeé un poco. Me olvidé de alguna palabra pero el “momento escupitajo” hizo que se me perdonara el resto. Aunque mi profesora me había “recomendado” (concepto chino de recomendar XD) no emplear “el escupitajo chino” (ese que sale de lo más profundo de estos asiáticos y cuyo sonido clama  al cielo) en mi presentación, en el último momento, la avisé de que iba a representar ese momento de lo más común en la vida de todos los estudiantes extranjeros en china….si, amigos….un jjjjjjaaaaaaapúuuuuuuuuuuu inesperado  y a corta distancia ¬¬. Ahora me alegro muchísimo, porque fue el momento más aplaudido de mi intervención. Y es que…aunque a los chinos no les haga mucha gracia que esta costumbre sea motivo de mofa, es el pan nuestro de cada día….en este país, además de esquivar coches, bicis, chinos, motos, carritos….por la calle…hay que sortear, a toda costa, los fluidos corporales de ciertos segmentos de la población. Siento de verdad hablaros de esto… pero se trata de parte de su “cultura·” o “incultura” depende de donde se mire…. Es para los altos, para los bajos, para los abuelos, para las cuarentonas, para los niños…..abunda tanto o más que la Cocacola….XD.
En fin, ¿por dónde íbamos? Ah si! Pues eso! Que aunque no lo hice a pedir de boca, resultó bastante divertido, o al menos eso me dijeron mis compañeros :D. Al final de mi presentación, uno de los profesores que formaban el jurado (eran unos 12 aproximadamente) me hizo una pregunta….Entendí lo que me dijo pero estaba tan nerviosa que solo pude responder un “Duibuqi, wo ting budong” (lo siento, no te entiendo…) (Esta frase es una de las más utilizadas  por los estudiantes extranjeros, es….simplemente BÁSICO), por lo que todo el mundo se rió y me aplaudieron bastante. Ya que estábamos a bromas… ¿por qué no terminar con una de ellas?
 

Recibí un diploma y un marcapáginas con el escudo de la universidad por participar, resulta más que evidente que no gané nada XD. Estoy intentando dejar unas fotos... pero la conexión va fatal.....

 

La niña del Cola Cao. 



lunes, 28 de noviembre de 2011

Calladita estoy más guapa


Supongo que alguna vez habréis escuchado la frase –“Calladito estás más guapo/a”; pues bien, debí aplicarme el cuento la semana pasada. Os explico, hace unos días, nuestras queridas profesoras nos hablaron sobre una especie de competición que organizaba la universidad esta semana. En esta competición participan representantes de todos los cursos del edificio en el que yo doy las clases. A la hora de elegir los representantes de cada grupo, las profesoras se han servido de una estrategia (para mi gusto) un tanto cabrona… (con perdón): nos han hecho hacer una redacción y una presentación que suponían un 25% y un 15% de la nota de sus asignaturas. Es decir, nos “han obligado” a hacer bien ambas tareas con vistas a esta competición. Y vosotros os preguntaréis ¿cuál es el problema?...pues os lo cuento… QUE NI YO NI NADIE QUERÍA COMPETIR!!
Yo confiaba en que dos compañeros míos saliesen elegidos como representantes para ambas competiciones (pues su nivel es el más alto y con muuuuuuuuuuuucha diferencia)….Oh ingenua de mi….no sé como narices me las he apañado, pero he sido elegida como representante para ambas partes de la competición (oral y escrita).
Soy la más pringada del mundo…. ¬¬
En el caso de la parte escrita, hice una redacción sobre el invierno en España. Como no me compliqué mucho con el vocabulario, la escribí como si fuese un cuento ….y un tanto nostálgica (esto último de forma involuntaria puesto que mi subconsciente me delata… si! Voy a echar de menos la Navidad ¡!). Pues eso… yo la entregué y me quedé tan ancha….Unos días más tarde… la profesora me llamó al terminar la clase. Yo creía que iba a reñirme porque me pasé la última hora de charleta con Vladimir (un chico majísimo que se sienta a mi lado y que es como para escribir un libro sobre el….un caso, vamos…). Y no, por lo visto no era para eso :s…
“Xiu Chuan (que es mi nombre chino) ni de (no me acuerdo como se dice redacción en chino XD ) hen piaoliang suoyi….blablabla”
Vamos, que me tocó la papeleta….bueno, al menos en este caso también a mi compañero Vinay…
Pues bien, me hizo llevarle al día siguiente mi redacción pasada a limpio con una fotografía pegada en un extremo. Se suponía que la fotografía no era relevante….hasta que hace un par de días he visto colgada mi redacción con mi foto (la más horrorosa que me quedaba en la cartera XD) colgada en la pared del pasillo…. Qué gracia me hizo…..(pa´matarla…).
En el caso de Kouyu (oral), quizá me lo gané a pulso….Mi intención era hacer una presentación que no me llevase mucho tiempo memorizar y que, a la vez, no aburriese soberanamente a mis compañeros…Entonces, decidí hacer un monólogo-teatro con el vocabulario más básico.
Pues bien, parece que gustó bastante ya que casi por unanimidad, resulté elegida como representante….(otra vez ¬¬… ). Me agrada el hecho de que ellos piensen que lo hago bien, pero, por otro lado, considero que es un tanto injusto para quienes se curraron una presentación mucho mejor que la mía, con un vocabulario más rico y bastante más interesante.
Por lo visto les pareció graciosa mi presentación, y yo que me alegro, pretendía no aburrirles pero ahora….

Feel like a clown….delante de todos los extranjeros…XDDDD y del jurado chino..claro


En fin, el caso es que la competición es pasado mañana y estoy supernerviosa…Soy totalmente consciente de que no voy a ganar nada, pero el hecho de hacerlo bien y tener una pronunciación buena ya es más que suficiente para mi persona.
Los que bien me conocen saben que no soy la típica persona a la que le guste destacar, llamar la atención, hablar delante de mucha gente… Todavía recuerdo mis primeros años de universidad….incapaz de mirar a otro sitio que no fuera la pared de enfrente para intentar apaciguar mis nervios.
Me veo demasiado verde y no sé si seré capaz de hacerlo… :s
Bueno, ya os contaré como va mi aventura. Un abrazo! La niña del Cola Cao.

domingo, 13 de noviembre de 2011

11/11/11

El 11-11-11 es una fecha señalada en el calendario chino. Mientras en España este día se ha hecho esperar debido al sorteo de la ONCE; en China ha tenido un significado bien distinto: en este día se celebra “el orgullo de ser soltero”. Sí, como os lo digo


Se trata de una fiesta que cumple dos objetivos: por una parte, ayuda a quienes no tienen pareja a encontrarla y, por otra, a declarar su orgullo por estar solos. Muchos chinos se casan este día porque piensan que les dará suerte.
Podría pensarse que están completamente locos pero tiene su lógica. Yo, que día a día observo a los jóvenes chinos, me doy cuenta de que no tienen vida; se pasan el tiempo pegados al libro o a su teléfono móvil y no suelen salir a divertirse (a menos que se trate de ir a un karaoke). Por estos motivos, considero que no se relacionan lo suficiente. Si a esto le sumamos el hecho de que el número de solteros se incrementa cada vez más en el Gran Gigante asiático, no es de extrañar que busquen desesperadamente a su media naranja, aunque solo lo hagan un día al año.
¿Cuál es la simbología de esta fiesta? ¿por qué el 11-11-11? Según me contó mi amiga Lusi, la cosa es bastante fácil:
1+1=2 Así, el número 1 representa a una persona soltera y dos números 1 a una pareja.


Los chinos llaman a este día: 光棍节 (guāng gùn jié). Hoy os hablaré de cómo se ha vivido esta “fiesta” en la Universidad de Beijing:
El otro día, una compañera de clase me habló sobre un evento de lo más peculiar que tendría lugar en mi universidad el 11-11-11. Por supuesto, yo desconocía por completo la existencia de un día como este. Me contó que en la biblioteca tendría lugar algo parecido a un “concurso de belleza” en el que los estudiantes solteros podrían elegir pareja entre un grupo de candidatas (también solteras) que se inscribiesen en un registro. No sabemos a ciencia cierta si la cosa fue así (a mi amiga se lo contó una chica china muy por encima), pero parece ser que a cada candidata se le asignaba una bombillita, si el chico apagaba la bombilla, significaba que esa chica en concreto no le gustaba y, si la dejaba encendida y el chico era correspondido, se formaría una pareja.
Un tanto machista-raro…pero, es lo que hay. Mu hubiese gustado asistir solo por verlo en persona, pero tenía que irme a clase de pintura con Duffman (otro día explicaré lo de Duffman XD).
Lo que sí pude ver es lo siguiente:


En medio de una de las calles del campus, una esquina dedicada a este día. Parecía que organizaban citas a ciegas entre los estudiantes solteros. Me acerqué (tal y como habríais hecho cualquiera de vosotros jaja), en plan radiopatio… y pude ver cómo, tanto chicos como chicas, introducían tarjetas con sus nombres y sus números de teléfono en unos buzones rosa-romántico-megamoña para encontrar pareja





Curioso, ¿no? Más curioso es ver a muchos chinos por el camino con ramos de flores para chicas a las que no conocen. Más monos ellos….mirando a todos lados…y pensando… ¿será ella? ¿será ella? O ¿será ella?


Aunque no se aprecia bien, ese chico tiene un ramo de flores (color lila) en la mano. No pude hacerle una foto de frente…me parecía muy cruel que me pillase.
En fin, solteros del mundo!!!si buscáis pareja no lo hagáis en una caravana de mujeres de esas que salen en España directo; veniros a China el 11 del 11 y probar suerte ;D.

martes, 8 de noviembre de 2011

Palacio de Verano

Aunque supuestamente esta entrada es sobre el Palacio de Verano, si continuáis leyendo, veréis que es mucho más…y que os voy a dar un poco la chapa, pero no gratuitamente.
Antes de hablaros sobre el Palacio de Verano, me gustaría hablaros de mi nuevo y fugaz amigo: “Momo” (Tianzema, en chino). Momo es un chico chino que, una tarde lluviosa a la puerta del Cervantes, me abordó por la calle con un “eh! Disculpa!, la chica de rosa!”. Yo que, para variar, caminaba mientras sonaba a todo volumen una canción de Marea en mi mp3, sorprendentemente le escuché hablarme.

Cuando un chino se te acerca , normalmente es porque quiere algo de ti…

-”Te he visto en Cervantes, sé que eres española y yo…bueno …yo…busco….he vivido…no sé cómo decir….”
Yo, aunque solo lleve 2 meses aquí, ya tengo cierta experiencia en el trato con los chicos chinos (también algún que otro malentendido que algún día os contaré..jeje) le solté un…
-“Quieres ser mi partner language, ¿no? Lo siento pero tengo ya a dos personas y no tengo apenas tiempo de quedar con ellos”
Tímidamente me respondió:
-“Sí…yo quería practicar….bueno…no quería olvidarme de lo que aprendí viviendo en España, para cuando vuelva allí a encontrarme con mi novia poder…blablablabla…”.
Mi cerebro procesó la información…. ¿ha dicho NO OLVIDAR, VIVIR EN ESPAÑA, VOLVER, ….? Y lo más importante…. HA DICHO NOVIA!!!!!!!! :O
Teniendo en cuenta esto, hice una valoración positiva de la situación :
-Solo por ser tú…ok, dame tu número…

La historia sigue.. pero os haré un resumen:

Momo es un chico encantador y distinto al resto de chinos. Es culto, inteligente, tiene sentido del humor …. Y le gusta la canción de “Hotel California”…vamos, lo que viene siendo buena gente…
Pues bien.. hace días (ya no recuerdo ni cuantos…soy como Dory la de Nemo.. perdonarme… XD ) fuimos al Palacio de verano: Belén, Victor, Momo y yo. El Palacio de Verano es visita casi obligada cuando uno viene a Beijing. Se trata de un enorme jardín que data de la dinastía Qing y constituye uno de los mejores ejemplos de la “cultura paisajística” (por así decirlo) en este país. De hecho, desde el año 98 forma parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Para una mayor información:http://www.chinatoday.com.cn/hoy/72.htm

(No tengo mucho tiempo, es cutre poner enlaces, pero lo siento…XD).

Os dejo por aquí algunas de las fotos:



Foto con el lago artificial de fondo… hacía un viento….Momo me hizo una sesión de fotos bastante bonita  (el entorno, no yo, claro jeje).


Es uno de los tropecientos leones diferentes que guardan este palacio


Momo y yo, foto tomada por chino espontáneo megahortera que, tras 3 intentos, fue lo mejor que pudo sacar XD.




El puente de los 17 arcos. Momo me ha contado que esto guarda cierta relación con el emperador….pero no lo recuerdo muy bien….se supone que hay los mismos arcos desde el medio hacia la derecha o hacia a la izquierda (contando el del medio). El número del emperador es el 9, por lo que si se cuenta de izquierda a derecha y de derecha a izquierda desde el medio, nos da 18 (contando 2 veces el del medio), es decir, 9 a un lado y 9 al otro, el emperador estaría en el centro. Curioso….




Este señor, pintaba hasta con (con perdón) el sobaco… era impresionante. En el momento de la foto ponía “Beijing Huanjing ni” (bienvenida a Beijing/Beijing te da la bienvenida…algo así).



Aquí estoy bien escoltada, por Momo y Víctor :DD


Soy consciente de que está borrosa, pero es la única que tengo con Belén.


Y esta foto con las peques. No sé si os he contado alguna vez que comencé mis estudios sobre Asia Oriental a raíz de las niñas chinas adoptadas en España. De hecho, mi tesis doctoral trata sobre este tema. No podéis imaginar la ilusión que me hace encontrarme a estas pequeñajas por Beijing :DDD.

Pero, ¿cómo han llegado a parar estas preciosidades a tierras españolas?

Mediante piezas sueltas de uno de mis trabajos del año pasado, intentaré explicar lo que, a grandes rasgos, supuso la política del hijo único en relación a este asunto:
Los últimos años de la década de los setenta, se caracterizaron por una crisis que afectaba al país en tres niveles: social, político y económico. Como consecuencia de estas condiciones desfavorables en el país, Deng Xiaoping inició su lucha contra la superpoblación para lograr las metas que se habían fijado para lograr el progreso en la China postmaoista. (Gomà, 2011) Así, en 1977 aparecían las primeras campañas de control demográfico que mostraban esa preocupación por el crecimiento poblacional con lemas como “uno es lo mejor, dos como máximo”.
Pero no será hasta 1979 con la introducción de la campaña del “hijo único” cuando se produce una mayor movilización por la causa de la superpoblación: saturando el país con carteles que rezaban temas tales como “China necesita una Planificación Familiar” o “El matrimonio y el parto tardío son dignos” (Hays, 2008); llevándose a cabo medidas mediante las cuales se autorizaba a las parejas a tener un solo vástago; distribución gratuita de anticonceptivos; promoviendo los abortos y esterilizaciones; etc.

El objeto primordial de la política del “hijo único” era la estabilización de la población china en el 2000, alcanzados los 1200 millones de habitantes4.
La política del “hijo único”, constaba de una estructura jerárquica mediante la cual el Gobierno Central establecía los objetivos y pautas, así como los nuevos métodos que se tenían que llevar a cabo. De eso se encargaría la CNPF (Comisión Nacional de Planificación Familiar) que, a su vez, delegaría en administraciones de menor tamaño y en los pequeños comités establecidos por todo el país. (Gomà, 2011) En términos generales, medidas a tomar serían tres: persuasión, coacción y la aplicación de sanciones (la presión y el castigo eran condiciones sine qua non para alcanzar el éxito). De este modo, si los padres obedecían la legislación establecida, eran recompensados con prestaciones económicas, concesión de préstamos sin intereses, salarios elevados o mejoras en sus viviendas (Hays, 2008) En las áreas rurales, las ayudas consistían en la asignación de lotes de tierras mayores y ayudas de puntos (que se traducirían en recompensas económicas), y reducción de impuestos. No obstante, si se tenía un segundo hijo, cualquier privilegio obtenido anteriormente desaparecería.
Entre los años 1982 y 1983, se intensificaron las medidas establecidas en pro del hijo único mediante las llamadas “4 operaciones”: vasectomías, DIU, ligadura de trompas y abortos (consentidos o forzados).
Llegados a este punto, cabe mencionar la oposición de las minorías étnicas del país quienes, lejos de apoyar la medida de control demográfico, la interpretaron como una nueva forma de control sobre ellas destinada a reducir su identidad como pueblo separado de la mayoría Han. (Gomà, 2011).
[…]
Con la entrada en el siglo XXI las autoridades chinas decidieron dar un paso más allá en su política de planificación familiar. El censo de julio de 2000 había tenido unos resultados aceptables (unos 1265 millones de habitantes en la RPC), lo que cumplía con los objetivos de no sobrepasar los 1300 en esa fecha. Sin embargo, como sostiene Gomà (2011) ante el temor de las autoridades al descarrilamiento de la política del “hijo único”, se ratificó la Ley de Población y Planificación Familiar, que entraría en vigor el 1 de septiembre de 2002. A partir del 2002, el incumplimiento de la política del “hijo único” se convertiría en un delito.
A pesar de los esfuerzos gubernamentales, la política del “hijo único” fracasó estrepitosamente en las zonas rurales del país. En estas áreas, había una mayor propensión al incumplimiento de estas reglas de planificación familiar y, ni que decir tiene que el control era mucho más factible en los núcleos urbanos por diversos motivos: una mayor visibilidad, las menores redes de apoyo y la reducción de la necesidad de tener descendencia asociada a mejoras en la calidad de vida (entre otros muchos).
Por el contrario, en el campo, los matrimonios solían ser más tempranos que en las ciudades y, normalmente, la elevada tasa de mortalidad infantil (comparada a la misma en las ciudades) conducía al incremento de la descendencia. Esta situación fue percibida por el Gobierno Central como un conflicto en potencia. Por lo tanto, se optó por relajar las medidas en las áreas rurales durante el periodo de 1982-1983; de tal modo que se permitía un segundo hijo si el primero era una niña a condición de que se espaciaran los nacimientos entre ambas criaturas. Sin embargo, a partir de 1984, esta “norma de relajación” se abolió y se volvió al estricto “hijo único” y a los controles rutinarios.
Para llevara a cabo esos controles se recurrió a los jefes de las aldeas, quienes recibirían cuotas económicas dependiendo del número de criaturas nacidas. El problema era que, con la pretensión de cumplir sus cuotas, obligaban a las mujeres a abortar, esterilizarse. Por este motivo, muchas familias decidieron tener a sus hijos en el extranjero, divorciarse y volverse a casar o incluso sobornar a médicos para que falsifiquen el certificado de nacimiento de su segundo hijo y lo inscriban como gemelo del anterior (a pesar de la existencia de años de diferencia entre los mismos).
Aunque es indudable que la política del “hijo único” no ha tenido el mismo calado en las áreas rurales que en las urbanas, Gomà (2011) considera que el tradicional apego de la clase campesina al Partido Comunista desde que Mao asociara el triunfo del movimiento comunista chino al respaldo de la clase rural, ha servido junto con la coacción y las recompensas de tierras para que la tasa de fecundidad se haya reducido notoriamente en el campo.
Una de las consecuencias más perniciosas que ha traído consigo la política del “hijo único” es el creciente desequilibrio demográfico por sexo5. Y es que la preferencia por el varón es tradicional en China, ya que el hombre es el que heredará el linaje y quien se ocupará de sus progenitores durante su vejez. Las mujeres, en cambio, una vez casadas pasan a formar parte de la familia de sus maridos6.
En el campo, el varón goza de mayor relevancia en comparación con las zonas urbanas ya que, en las áreas rurales, las niñas son consideradas mano de obra desperdiciada, y responsables de la pérdida del linaje (puesto que únicamente el varón heredará el apellido familiar).
Por otra parte, destaca la relevancia económica del varón en tanto en cuanto éste colabora en las tareas del campo. Una vez que el patriarca de la familia se jubile o fallezca, su descendiente masculino heredará las tierras.
Tal interés enfocado al nacimiento de un varón, provoca que la mayor parte de los campesinos (cerca de un 90%) decidan tener un segundo bebé si el primero era una mujer. El límite de dos hijos en las áreas rurales y la cultura de la superioridad del varón, ha derivado no sólo en el abandono de las pequeñas, sino incluso en el infanticidio femenino (a pesar de la ilegalidad de los mismos) (Gomà, 2011).
Se estima que en los años 90, alrededor de 160.000 infantes fueron abandonados. Más del 90% de los menores que se encuentran en orfanatos son niñas (los pocos varones que hay o son discapacitados o están gravemente enfermos) (Floch, 1996).
Sin embargo, el verdadero factor que marca un antes y un después en el desequilibrio de sexos en la República Popular China ha sido el aborto selectivo.
Aunque este tipo de prácticas están prohibidas, se recurre al soborno a los médicos y al examen por ultrasonidos a la hora de determinar sexo del bebe y, si este es femenino, abortar (la inmensa mayoría de los bebes abortados son niñas).
Por suerte, en caso de abandono de las menores, existe la posibilidad de ingreso en un orfanato y es precisamente en este punto de la historia donde aparece la ADOPCIÓN INTERNACIONAL.
En términos generales, las asociaciones y las familias adoptantes vinculan los años 1995 y 1996 a los “comienzos” de la adopción internacional en España. De hecho, estos grupos relacionan más concretamente el inicio de la misma con la emisión a finales de 1995 de un reportaje titulado “The Dyning rooms”. Se trataba de un programa realizado por un equipo de reporteros del Channel Four del Reino Unido (en el caso español apareció en el programa de RTVE “Documentos Tv”) en el que se mostraba las espeluznantes condiciones de vida de los pequeños en los orfanatos estatales de la República Popular China7.
Muchos son los relatos, entrevistas y comentarios de padres adoptantes se inician con “Todo empezó allá por el año 1995 cuando en la televisión se emitió un reportaje sobre los orfanatos chinos. Aquello despertó en nosotros la ilusión de ayudar adoptando una niña”.
Y es que, mientras las imágenes eran retransmitidas, llamadas de familias, parejas y personas solas interesadas en adoptar a una de esas niñas producían un colapso de las líneas telefónicas de la cadena de televisión que lo emitía ( Marre, 2004).
En los días siguientes, muchos gobiernos autonómicos tuvieron que habilitar oficinas de información acerca de las solicitudes de adopción en China. No obstante, ante una respuesta negativa por parte de la administración, gran parte de los demandantes se aglutinaron creando una asociación de apoyo a padres y futuros adoptantes en la República Popular de China.
De igual modo, y según aumentaban las solicitudes de adopción en este país, se fueron creando otras muchas asociaciones con la pretensión de asesorar, ayudar y facilitar este tipo de adopciones.
En lo que al reportaje mencionado respecta, éste no solo sirvió como punto de partida de las adopciones internacionales a gran escala en nuestro país, sino que también supuso una mejora de los orfanatos chinos gracias a la presión internacional que ejercieron estas imágenes en el gobierno de la República Popular.
“China es hoy otro país y sus orfanatos han dejado de ser el desahucio de la severa política de natalidad del Gobierno. Las habitaciones de la muerte, en muchos casos, se han convertido en habitaciones de la vida. El régimen de Beijing negó entonces que sus huérfanos estuvieran desatendidos, pero de puertas adentro admitió la realidad e inició un gigantesco programa de mejora que ha dado una oportunidad de salir adelante a toda una generación de menores abandonados. El plan, llevado a cabo sin publicidad, ha consistido en una mejora de los orfanatos existentes y la creación de nuevos, el fomento de la adopción –nacional e internacional- y la creación de políticas para reducir los abandonos (incluidas ayudas económicas a padres de hijos con problemas físicos o mentales)”
David Jimenez (2010), corresponsal de El Mundo en Asia

Numerosos son los testimonios de los padres adoptantes que corroboran estos progresos en los orfanatos chinos (Véase Anexo 6). Sin embargo, no debemos olvidar que el problema de las niñas en los orfanatos chinos sigue hoy en día vigente y que, aunque estén mejor atendidas y cuidadas, aun esperan ser adoptadas.
En definitiva: La República Popular China, actualmente el país más poblado del mundo, se enfrenta a un reto demográfico sin precedentes. La política del “hijo único” instaurada a finales de los años 70 no sólo ha contribuido a la una reducción poblacional, sino que también ha traído consigo un conjunto de efectos latentes. Entre los efectos o consecuencias no deseadas se encuentra la lamentable situación de las niñas chinas frente a los “pequeños emperadores” varones. Y es que, en este país, la maldición de ser niña es un hecho palpable. Se trata de una sociedad con una estructura patriarcal ancestral, manifiesta a nivel material y simbólico, y que genera prácticas de reproducción social y cultural, tales como el abandono de las menores, la ilegalidad de las mismas o, en el peor de los casos, el infanticidio femenino (Venegas Medina, 2010).

Las pequeñuelas de la foto tienen mucha suerte, como suele decir mi madre:

“Hay niños que nacen de la barriguita de las mamás, y otros lo hacen del corazón; Vosotras tenéis mucha suerte, sois de las pocas que lo hicisteis del corazón”.

Siempre recordaré estás palabras. Me parece una reflexión preciosa.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Mi trozo de pan

¿Para qué voy a engañaros? Todo en esta vida tiene sus ventajas y sus inconvenientes…un  “qué envidia ¡!! Qué bien vives! Cómo mola China” podría perfectamente ser respondido con un “Ya PERO….”. En mi caso, el “ya pero…” es que últimamente me siento muy sola. Como ya sabéis, estoy forever alone en un apartamento en el distrito de Haidian. A pesar de mantenerme todo el día ocupada y cambiar de planes constantemente, no puedo evitar echar de menos a ciertas personas. Muchos días llego a casa asqueada de tanto chino…y me apetece cambiar de aires. Hoy he decidido mostrar cómo me siento a raíz de mi cena de anoche. Anoche cené un par de huevos fritos sin pan; creo que es la mejor definición de mi vida en Beijing: me falta algo y sin ese algo la vida en este país no tiene sentido. Digamos que, metafóricamente hablando, me falta mi trozo de pan.

Desde mi llegada a BJ, no he dejado de sorprenderme a mí misma. Soy capaz de moverme sola por la ciudad, de viajar a otra provincia, de entenderme con el personal del banco, de regatear, de aprobar mis exámenes, de tantear el sabor de una pata de pollo,….Sin embargo, no puedo vivir sin ese pedazo de pan. Una amiga china me dijo, “hay muchos panes en este país, podrías elegir  cualquiera, tienes una gran variedad” pero, ¿cómo elegir un pan relleno de “mermelada de fruta y carne” cuando en casa  te espera la imagen de un pan de pueblo recién horneado? Y es que, la mera imagen de ese pan de pueblo me sacia más que darme un  festín con un pan autóctono, por muy exótico que pareciese.

Últimamente estoy adaptándome cada vez más a la forma de ser de los chinos; a mostrarme alegre cuando estoy triste, despreocupada cuando tengo un problema grave…pero ya no puedo más. En resumidas cuentas, necesito un abrazo, necesito que me den las buenas noches antes de irme a dormir, que se preocupen por mí….Necesito mi trozo de pan. 


domingo, 23 de octubre de 2011

Viaje a Benxi

Hola gente menuda!!! Os tengo abandonadicos!!! Tengo muchas cosas interesantes que contar, pero hoy solo tengo tiempo de hablaros sobre mi viaje a Benxi con Lusi. Benxi es una pequeña ciudad entre montañas situada en la provincia de Liaoning, al noreste de China.
Lo cierto es que este viaje me ha cambiado un poco la vida; me explico: le eché narices al asunto y me fui sola en un tren chino.
Aunque Lusi me había llevado dos días antes al lugar en el que debía tomar mi tren, el día del viaje me levanté temprano por si las moscas. La estación a la que debía ir estaba situada en el segundo anillo, en la línea 2 del metro. Mi tren salía  a las 7 de la mañana, por lo que salí a las 5 de casa, cerré la puerta y…. ¡ J**** qué frío! Bajé las escaleras de mi edificio hasta llegar a la calle, los ciudadanos de mordor (sótano de mi casa) todavía no daban señales de vida. Únicamente me crucé con las abuelas barrenderas  que, concentradas en su tarea, hacían caso omiso a la extranjera cargada de bultos que cruzaba la calle hasta llegar al metro. Una vez en el metro, pude comprobar que no era la única que estaba muerta de sueño, el chico del scaner se había quedado dormido en su puesto de trabajo. Esperé y esperé hasta que llegó el tren, era la primera vez que veía el metro de BJ tan vacío, daba gusto estar allí. Por fin, a las 6:30 de la mañana llegué a la estación y esperé en el lugar que Lusi me había indicado. Eran las  6:50 y no había movimiento a mi alrededor…algo iba mal. Decidida, opté por preguntarle a la señora del kiosko si estaba en el lugar correcto. Mi chino de parvulario y  el billete sirvieron para darme cuenta de que, efectivamente, no estaba en el lugar apropiado. De hecho, tenía 10 minutos para llegar  a la otra punta de la estación y subirme al tren. Corrí tanto como pude, desde aquí pido perdón a toda la gente a la que empujé sin querer  XD y, milagrosamente, llegué a menos 1 minuto. Entré en el vagón y busqué mi asiento; era fácil de encontrar, se trataba del único sitio libre que quedaba en todo el tren. Después de muchos “Duibuqi” esquivando a niños, abuelas y demás pasajeros que ocupaban el pasillo con sus pertenencias, pude sentarme en mi sitio. Arrancó el tren y pensé….sinceramente, estoy loca…
Me había subido a un tren Chino en el cual no se hablaba ni pizca de inglés y sin saber en qué parada debía bajar (solo se comunicaba en chino). Intenté no dormirme para no pasarme de parada y puse el oído a  conversaciones ajenas para intentar interceptar a alguien que bajase en mi misma parada y seguirle. A las 2 horas y media, una chica que hablaba por teléfono le dijo a su padre que iba al mismo sitio que yo y a qué hora llegaría el tren….. ¡uff! Supongo que todos los tontos tenemos suerte jeje. A eso de las 11 y media de la mañana, la chica empezó a levantarse y buscar su maleta. Yo hice exactamente lo mismo y la seguí hasta el pasillo. La megafonía anunció una nueva parada en chino, era la mía, increíblemente había entendido lo que decía. Había llegado a mi destino. Bajé del tren e intenté seguir a la chica del teléfono. Pisándole los talones llegué hasta la salida, en la que una señora con malas pulgas y de uniforme revisaba los billetes. Resulta bastante curioso que te revisen el billete también a la salida del recinto. Por fin, entre la multitud, apareció Lusi gritando mi nombre; ya podía tranquilizarme.
Al salir de la estación, eché un vistazo a mi alrededor y descubrí que todo el mundo me estaba mirando. Lusi me dijo: “no les hagas caso, son pueblerinos, nunca han visto a una extranjera”. Seguimos caminando hasta el coche, donde estaban sus padres esperándome: “Hola María!” dijo su madre con un marcado acento latinoamericano, “bienvenida”. El padre de Lusi, que no sabía nada de español, se limitó a mirarme y sonreír. Supongo que le sorprendió bastante que fuese capaz de darle los buenos días en chino y decirle que estaba encantada de conocerles.
El coche arrancó y éste fue el verdadero comienzo de mi viaje. Lusi me explicó que antes de ir a casa, iríamos a visitar las montañas de la zona. Aunque me apetecía mucho conocerlas, no me agradaba la idea, pues apenas había dormido la noche anterior y tenía todas mis cosas en el maletero del coche (de hecho, no pude sacar más que el bolso con la cartera; ni teléfono, ni chaqueta…).
La madre de Lusi me prestó su cámara de fotos:






 En estas montañas, ponía el nombre de “Mao Zedong”. Lástima que no pude fotografiar todos los caracteres…

Este es un ejemplo bastante gráfico de la seguridad laboral en este país…os lo diré en chino “Mei you” (NO HAY).

 Aquí tenemos a Lusi comiendo uno de sus aperitivos favoritos; no sé si se aprecia en la foto pero son patas de pollo picantes….si….con sus uñitas, cartílagos y demás….mmmm que ricura por Dios…….dagg!!! he de reconocer que me hizo probarlas…de sabor no están mal pero bastante viscosas….no es de mi agrado, la verdad XD.

Esta es una de mis fotos favoritas de este viaje… en un atasco de casi 2 horas de coches, motos y autobuses, una anciana bastante ágil se abre paso y desaparece esquivando a cientos de conductores que matan su tiempo echándose la siesta con los pies en el volante.
Después de varias horas, por fin llegamos a las montañas. El padre de Lusi desapareció hasta por la noche y nos quedamos con su madre, la señora de verde que sale en las fotos. Aquí os dejo la sesión de fotos:











Otra de mis fotos preferidas es esta: el abuelo con su nieta, mirando los pececillos y con el culete al aire, una escena de lo más curiosa :D


La madre de Lusi, una china moderna.


Comiendo carne de cabra en pinchitos…de este momento me arrepentiría días después….chicos, si viajáis a China, ni se os ocurra comer carne de cabra, y menos  hecha en la calle o la montaña, que…como dice Belén: “ todas las condiciones higiénicas y sanitarias garantizadas”


Y ahora, como dice mi madre, observemos el entorno:







Como podéis ver, se vendían productos naturales de la montaña de todo tipo, así como dulces típicos de la región (por cierto, de sabores un tanto peculiares).
  

Cuando llegamos a la ciudad, la familia de Lusi me invitó a cenar en un restaurante. Yo estaba agotada, pero todo estaba riquísimo.
A eso de las 10 de la noche llegamos a su casa. Supongo que os preguntaréis…¿cómo es una casa china? Os describiré la forma de vida de los padres de Lusi para que os hagáis una idea. En el barrio, como en la mayoría de los barrios de Pekín, las farolas brillan, pero por su ausencia. El edificio era bastante antiguo, sin luz y lleno de suciedad… (me recuerda bastante al mio aunque, al menos, yo tengo luz en el portal), de hecho, nos cruzamos una rata al subir. La casa de Lusi me sorprendió positivamente, era bastante amplia y estaba muy limpia. Creo que el hecho de que esté situada en una ciudad pequeña tiene mucho que ver con ciertos detalles… Al entrar, me hicieron quitar los zapatos. Antes de llegar a China, pensaba que el quitarse los zapatos dentro de las casas era una tradición en oriente y no le encontraba mucho sentido salvo la comodidad. Vistos los hábitos chinos: escupir por la calle a todas horas, tirar todo al suelo, bebés que hacen sus necesidades en la calle, portales en bruto y llenos de polvo desde el día en que terminaron de construirse….; esta costumbre empieza a cobrar cierto sentido. Nadie querría que tal suciedad entrase en sus casas. La madre de Lusi me dijo que podía ducharme si me apetecía. “Te he comprado una toalla nueva, para ti solita”, me dijo con una amplia sonrisa….pero, en cuanto vi aquella toalla  (si podía llamarse así) se me quitaron todas las ganas de una ducha de golpe. Y es que, en China tienen por costumbre utilizar toallas de bidé como toallas de ducha….y eso, a 7 grados de temperatura….hace una gracia que no veas XDDD.
“ No, ya mañana….lo siento, estoy cansada…muchas gracias” dije con la esperanza de que a la mañana siguiente hicese menos frío. Por desgracia, me equivocaba… a la mañana siguiente, abrí los ojos y vi que Lusi ya no estaba en la cama. La vi en el salón devorando patas de pollo como si no hubiese un mañana….”Buenos días, ¿qué tal has dormido?, aquí tienes tu desayuno”…
No podía creerlo…. Patas de pollo, tallarines y ternera…Los que bien me conocen, saben que jamás como recién levantada y mucho menos eso!!!! En una punta de la mesa descubrí un taco de leche de soja:” ¿puedo abrirla?” “Sí, claro, lo que tu quieras”….
Esas palabras eran música celestial para mis oídos….con la leche bastaría para no desmayarme ni vomitar el desayuno…. Sin embargo… a los 3 minutos… “ ¿pero solo comes eso?”…”no tengo mucha hambre….” “tienes que comer algo”… y me sirvió tallarines y ternera en el plato….En fin, no me quedaron más narices….
La familia de Lusi se portó muy bien conmigo, valoro encarecidamente su hospitalidad, pero no podía evitar el choque cultural.
Era el momento de la ducha….Entré en el baño con mi “toalla” en la mano y, misión imposible…. ¿cuál era el gel y cuál el champú? Aquellos botes eran iguales…… y sí, amigos, me lavé el pelo con gel de baño…más guapa que salí de casa esa mañana…. XD… Aún así, nada evitó que todo el mundo me mirase y le dijese a Lusi que su amiga era muy guapa  (ya os comenté en anteriores post que a los chinos les llaman mucho la atención los ojos grandes). Si me diesen un euro por cada vez que me llaman “piaoliang” (guapa/bonita) tendría para el billete de vuelta a España XD. Ya sabéis que no soy nada del otro mundo pero, por suerte o por desgracia, tengo justo lo que ellos consideran bonito, 2 ojos enormes que me ocupan media cara.
Mientras atravesábamos las callejuelas de Benxi, las miradas se concentraban en mi persona….la discreción es un concepto del que los chinos no han oído hablar….te miran fijamente, te incomodan, les mantienes la mirada para hacerles comprender que te das cuenta de la situación y ellos te la mantienen a ti para que te des cuenta de que les toca el pie todo lo que tu creas. Al final, te cansas y los das por imposible.
En fin, esa mañana fuimos al centro de la ciudad a hacer lo que más le gusta a Lusi, ir de compras. Yo, como necesitaba un abrigo, no me parecía mal el plan.

Llegamos a la zona comercial y comenzó el espectáculo:
La china que, micrófono en mano, grita la oferta del día a la puerta de un establecimiento y a grito pelado…. ¿no os recuerda a los gitanos de los mercadillos? Lo curioso es que se trata de una boutique :S

Los niños que compiten en un concurso de  talentos organizado por un centro comercial.


Los abuelos que bailan en la calle con motivo de la fiesta de aniversario de instauración de la República Popular.


Los anuncios de estudios fotográficos que inmortalizan lo pastelosa que puede llegar a ser una boda china.

Hasta ahí la mañana de compras. Por la tarde, quedamos con una amiga de Lusi “Ting Ting” para ir a cenar a uno de los restaurantes más famosos de la ciudad. La chica era un cielo, me entendía con ella en inglés, qué lástima que no viva en BJ. Cuando todo el mundo me miraba por la calle o en el restaurante y me ponía nerviosa, ella me sonreía y me decía “ Isabel, look at me”.



 La verdad es que todo estaba bastante bueno.
Cuando ya nos íbamos a casa, un chico le envió un sms a Lusi invitándonos a un karaoke. Lo que yo no sabía es que Lusi había puesto en su “KUKU” (más o menos el msn chino) que iba a traer a su casa a una extranjera muy guapa…Lógicamente, desde ese mismo instante, me convertí en un mono de feria.
Llegamos al karaoke sobre las 9 y media de la noche. Yo nunca había estado en un karaoke y, mucho menos, en un karaoke chino. Las voces de los cuarentones borrachos desentonando se escuchaban desde el recibidor, atravesamos varios pasillos hasta llegar a la sala privada en la que estaban los amigos de Lusi. Se trataba de una habitación pequeña con una pantalla , altavoces, un sofá y una mesa. Había 4 personas en la sala, 3 chicos y una chica (muy guapa, por cierto), la mesa casi no se veía de las cervezas que habían bebido.
“Nihao!!!!!!” “Nihao!!!” Nos presentamos, me invitaron a sentarme, me compraron cocacola y palomitas y cantaron algunas canciones:


En esta pantalla elegían la canción que querían cantar.

La que más me gustó fue esta (podéis ver el video):
http://www.youtube.com/watch?v=XSfBAS4NvzM&feature=related

Es taiwanesa, bastante curiosa, el cantante se hace llamar “El richie” así que… no os digo más XD.
La cantó un amigo de Lusi, “el Alex Ubago chino” como cantaba el tio!! La madre que lo trajo!!! Tengo videos suyos cantando, siento no poder colgarlos…no tienen desperdicio…

Éste es el susodicho… no me acuerdo de su nombre… pero vamos… “Ubago” XD Muy majo el chico, un poco cani con los oros…pero bueno…
En esta estamos todos:


La verdad es que esa noche me lo pasé como una enana, me reí un montón.
Al día siguiente, visitamos a la abuela de Lusi. Antes de llegar a casa de su abuela, Lusi me advirtió “ es la primera vez que ve a un Occidental, estate tranquila, no la asustes”. Cuando llegamos a la casa, su abuela no estaba. De nuevo, otra casa china me sorprendió para bien: luminosa, reluciente y muy bonita. De hecho, saqué fotos, para que os hagáis una idea:








¿qué os parece? Muertos os habréis quedado…. En mi opinión tenemos demasiados prejuicios sobre la forma de vida china…
Bueno, vamos a lo que nos interesa, la abuela de Lusi. Llegó 15 minutos más tarde de lo esperado, cuando nosotras llegamos, nos abrieron la puerta su tio y su prima (que están en la foto con nosotras). Al entrar por la puerta, la abuela se asomó al salón con más miedo que vergüenza, me miró y miró al suelo. El resto de familiares intentaron tranquilizarla hasta que, al fin, se acercó a mi… y murmuró algo en chino que Lusi tradujo como “es guapa”…. Semanas después, gracias a mis clases de chino…he recordado sus palabras y lo que dijo fue “no es tan fea como esperaba” XDDDDDDDD. En fin, una cachonda. Empezó el interrogatorio: de dónde eres, cómo te llamas, cuánto tiempo llevas aquí….blablabla.
Tras la ronda de preguntas, llegó la hora de la comida. Me sentaron a la derecha de la matriarca quien, con aire desconfiado observaba de reojo todos mis movimientos. Repetía una y otra vez en chino “come de eso, come de aquello…esta chica no come nada!!”….La verdad es que fue un momento bastante gracioso…en el que no era capaz ni de agarrar mis palillos, por más que intentase enseñarme.
Ese día por la noche, quedamos con los amigos de Lusi para ir a lo que ellos llamaban discoteca…. Y lo que yo llamo “disco-puti-teatro”. Me explico, era como una sala de variedades, en la que podías bailar, ver chicas semidesnudas, ver actuaciones de cantantes, camareros que hacían malabares con botellas en llamas….







 Aunque la vestimenta indique lo contrario, el personaje que baila  en la barra es un chico….al menos por la cara… porque, por todo lo demás, una mujer en toda regla, más femenino que yo XD.
El momento estelar de la noche fue cuando el jefe de todo el cotarro anunció un sorteo de 12 litros de cerveza a quienes ganasen un juego….Los amigos de Lusi gritaban a coro mi nacionalidad hasta que me hicieron salir al escenario con Lusi, no teníamos ni idea de qué traba el juego. En el momento en el que el presentador explicó las reglas, más de la mitad de los chinos que había en el escenario salieron por patas….  Yo no entendía qué estaba pasando. Miré a mi alrededor…. ¡ todos chicos! Las únicas féminas del escenario éramos Lusi y yo. Lusi me explicó el juego al oído. Debíamos cantar una estrofa de una canción (en chino, por supuesto) y teníamos que aguantar el máximo tiempo posible cantando la última palabra sin respirar.
La letra de la canción venía a decir lo siguiente “La primavera se marchó, primavera vuelve!!!!!” La última palabra creo que era “lai”. En fin, los chinos se dejaron los pulmones y, aunque yo conseguí pocos segundos, la gente me aplaudió y el presentador me dijo que cantaba bien y me regaló un cd de música tecno-discotequera china XD. Me lo pasé como una enana.
Lo malo era que, al día siguiente, habíamos quedado con Tíng Tíng a las 6 de la mañana en la estación de  autobuses para irnos a unas cuevas….dormimos 4 horas…muertas estábamos… pero bueno, conseguimos levantarnos.
No solo fuimos a las cuevas, sino también a un parque enorme en el que pude encontrar al chino Cudeiro  que había sobrevivido al lago.






















Típica  china que se echa la foto conmigo porque dice que soy guapa y es ella más guapa que yo XDDD y bastante más, por cierto.








Y esto es todo por hoy J intentaré contaros más cosas dentro de poquito… próxima entrada: el palacio de verano.